El Bolillo Gómez, técnico de los salvadoreños, vivió uno de los mayores sustos de su carrera. El Salvador recibió en casa a Surinam, los caribeños llegaron clasificados a este encuentro, mientras los locales no.
Surinam saltó al terreno de juego con la mentalidad de amargar la noche de los cuscatlecos. Los visitantes se apodaron del balón y tras un largo dominio, Justin Lonwijk puso el primer gol de la noche. El Estadio Cuscatlán se silenció y los fantasmas del pasado provocaron miedo en los locales.
El miedo invadió más a los salvadoreños, tras conocer que Puerto Rico estaba ganando. Esta combinación de resultados estaba dejando eliminado a El Salvador y provocando un fracaso rotundo en el proceso del Bolillo Gómez.

La calma llegó al minuto 32, Brayan Gil no perdonó y provocó el empate momentáneo. Con este resultado, El Salvador estaba asegurando el segundo boleto del grupo para la segunda fase de la eliminatoria.
El segundo tiempo fue muy estratégico, ambas Selecciones estaban clasificando con el empate y salieron con otro chip. El ritmo de juego bajó, los dirigidos por el Bolillo Gómez decidieron cuidar el 1-1.
La Selección de El Salvador reflejó que todavía no se adapta al sistema del Bolillo Gómez y ante su pobre presentación solamente deja dudas de cara a la Copa Oro 2025.
El Salvador y Surinam clasificaron a la última ronda de la eliminatoria mundialista. Los caribeños se quedan líderes con 10 puntos y los centroamericanos con 8 unidades.